lunes, 11 de abril de 2016

5ª etapa: Quito

5ª etapa: Quito

Poco más de 90 km. separa Otavalo de la capital ecuatoriana. En el recorrido los terrenos calizos de los Andes nos ilustran sobre su origen terciario. Un territorio donde la vegetación disminuye y la erosión aumenta por la pendientes increíbles que vemos.
Quito nos recibe con un cielo cubierto que amenaza agua. Es la estación de las lluvias. Esta es una ciudad que se desparrama entre volcanes y sierras adoptando una forma alargada.

                                     Quito desde el cerro del Panecillo

La Plaza de la Independencia es el corazón del casco histórico de Quito. El Palacio presidencial, la Alcaldía, el edificio de la Curia y la catedral se reparten los cuatro lados de la plaza.

Palacio de la Presidencia



   15 km al norte de Quito se encuentra la ciudad de la Mitad del Mundo, un recinto cerrado donde se ubican algunos pabellones, tiendas y el monumento que nos recuerda que estamos en el centro de la tierra, en la línea del ecuador.  Para llegar hasta allí de manera económica es  necesario tomar un autobús desde cualquier punto de la ciudad hasta la estación Ofelia y allí tomar otro autobús hasta el destino, o bien tomar uno directo que circula por la carretera occidental y que hace la ruta desde el panecillo (0,25 $). La entrada básica al recinto cuesta 3,5 $.




La cocina ecuatoriana es rica y variada. Como primer plato se suele servir, por ejemplo un sancocho de bagre, una sopa de verduras, pescado y patata.


Los ecuatorianos no sólo no temen a los volcanes, si no que han aprendido a vivir con ellos. Ciudades como Quito se atreven a escalarlos  ubicando en sus faldas barrios enteros. Al Guagua Pichincha con sus 4776 metros se puede subir en telesférico.


                                          

                                   Volcán Guagua Pichincha

                        La Basílica de Quito desde la plaza de la Independencia

                     Cerro del Panecillo desde la plaza de la Independencia

Recordamos Quito como una gran ciudad, muy descuidada y de grandes contrastes entre los barrios centrales y los periféricos, donde las infraviviendas escalan las laderas. Es una ciudad bien comunicada. La red de transportes urbanos es amplia y barata. Moverse por la ciudad es relativamente fácil y rápido. Es también una ciudad cara. Los precios de ropa, calzado, alimentación, etc, contrastan con lo barato que resulta comer en uno de los innumerables pequeños restaurantes que proliferan por doquier. Para el hospedaje es aconsejable elegir una zona tranquila. La Mariscal es una de las zonas elegidas por los turistas, se trata de la zona colindante con la avenida 6 de Diciembre.

2 comentarios:

  1. Viajamos contigo Manuel. Suerte y buen camino.

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  2. Me tienes enganchada a tu aventura! Es mejor que cualquier programa de talent show de tv.

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